17/12/14

El Mito. Los Mitos

El mito: 


Leyendo mitos ajenos

El grupo humano que crea un mito, lo cuenta y escucha como un relato verdadero, sagrado, ejemplar y significativo. Pero este valor sustancial se pierde cuando ese mito es relatado por otro grupocultural, porque otro grupo tiene sus propios mitos que explican las mismas cosas de otra manera. Por lo tanto, los que no se adecuan a su forma de ver el mundo son tildados de invenciones, ficciones, mentiras y, en algunos casos, se llega a destruirlos. La historia está llena de ejemplos en los que un grupo con más poder aniquiló los textos fundamentales de otro. El Popol Vuh, libro sagrado de los mayas, fue quemado junto con otros libros por los españoles por orden del obispo Diego de Landa. Años más tarde, el funcionario narró esta quema de la siguiente forma: “Hallámosle gran número de libros... y porque no tenían cosa en que no hubiese supersticiones y falsedades del demonio, se lo quemamos todo, lo cual... les dio mucha pena.”

Los mitos y otros textos
Los mitos suelen confundirse con las leyendas, los cuentos populares e, incluso, las anécdotas. Si bien para una cultura que “importa” esos relatos de otra, las diferencias entre estas clases de textos son inexistentes, para los integrantes de la cultura que los creó los mitos son narraciones orales que se distinguen del resto de los relatos por muchas razones...
• Son sentidos como sagrados y verdaderos.
• No se relatan para entretener ni divertir, sino para transmitir un conocimiento fundamental.
• No se cuentan en cualquier momento, sino en ceremonias rituales como el casamiento, la iniciación a la vida adulta, la muerte o en otros momentos muy especiales, porque los mitos se viven, constituyen una experiencia religiosa.
• Llevan a los oyentes a otro tiempo, el de los orígenes, el de los seres sobrenaturales que participaron en la creación de todo lo que existe.
• Explican cómo todas las cosas comenzaron a existir: los astros, el agua, el fuego, la muerte, las enfermedades, el hombre y la mujer, el amor, una montaña, una manera de trabajar...
• Indican cómo interpretar el mundo: ¿Cuál es la relación que existe entre los padres y los hijos, los esposos, los amigos? ¿Qué pasa después de que nos morimos? ¿Por qué sale el sol cada día? ¿Cuándo se considera que un chico es adulto? ¿Cuáles son los límites del poder de los hombres? ¿Cuál es el sentido de la existencia?
• Son ejemplares, en otras palabras, explican aspectos importantes de las relaciones sociales entre las personas contando cómo se produjeron por primera vez la justicia, el matrimonio, la cocción de alimentos, el entierro de los muertos, los sacrificios religiosos.
• Esa interpretación del mundo es común a todo el grupo cultural.
• No son relatos aislados, sino que un mito forma parte, junto con otros, de un sistema mayor que se llama “mitología”.
Adaptado de: L. Otañi. y M. Gaspar,
Cosmologías y paladines. Antología de mitos universales (en proceso de revisión).


En el texto se dan muchas características del mito. ¿Pueden construir a partir de ellas una definición
del término “mito”?


Los trabajos de Heracles (Hércules)


Heracles, a quien los romanos llamarían Hércules, era hijo de Zeus y de Alcmena, una princesa de Tebas. Hera, enojada porque Zeus había llevado a cabo otro de sus casamientos con mujeres mortales, envió dos horrorosas serpientes para que mataran a Heracles cuando aún era un bebé. Heracles y su hermano gemelo Ificles dormían en un escudo que les servía de cuna, cuando las serpientes reptaron hacia ellos. Ificles gritó y rodó fuera del escudo. Pero Heracles, un niño inmensamente fuerte, cogió las serpientes por el cuello, una en cada mano, y las estranguló.

26/11/14

Bécquer como escritor romántico



Los ideales de la Revolución Francesa influyeron en todas las esferas de la vida, transformando no solo las  estructuras económicas, sociales y políticas sino también las manifestaciones culturales. En ese contexto, el romanticismo surgió sobre todo como una crítica de la Ilustración y para desterrar el supuesto de la supremacía de la racionalidad por sobre las cualidades humanas.

Lo fantástico legendario



En las leyendas de Bécquer, lo fantástico está mas relacionado con lo maravilloso que con lo fantástico, porque en ellas lo legendario engloba lo natural y lo sobrenatural. Durante el medioevo, el hombre vivía lo sobrenatural como una presencia concreta. Por eso, fue desarrollando una serie de creencias, a veces basadas en antiguas tradiciones paganas, para prevenirse del mal o provocar la suerte. En la actualidad, repetimos muchas de ellas sin saber su verdadero origen. Para entender particularidades de leyenda es necesario que diferenciemos también lo fantástico legendario de lo maravilloso. En los cuentos de hadas, el ambiente no es del mundo cotidiano: todo sucede en tiempos lejanos, en reinos que no podemos situar con claridad y con seres que no guardan relación con los de nuestro mundo y que resultan arquetípicos. En las leyendas fantásticas, en cambio, el mundo es el nuestro, los seres son próximos, los ambientes son reconocibles y el tiempo no se extiende mas allá del tiempo medieval. Por otro lado, ciertas características diferencian el mundo fantástico de estas leyendas de lo fantástico en los relatos modernos, porque en estos últimos la intensión es diametralmente diferente de la leyenda: el autor busca la complicidad del autor con la perspectiva desconcertada del personaje ante una situación que supera los procedimientos racionales de comprensión de la realidad. El orden de la vida queda alterado y la intervención divina pocas veces tiene que ver con ello, En cambio, en las leyendas y textos medievales, el orden sobrenatural es parte de la vida: en las leyendas fantásticas, el lector aprende a reconocer las señales divinas; en el relato fantástico moderno, debe poner en juego su capacidad lógica interpretativa para comprender la grieta que se ha producido en su entendimiento racional de los sucesos. 


 Las leyendas de Bécquer son reelaboraciones de relatos orales tradicionales pertenecientes a la historia local. Precisamente, uno de los propósitos de los románticos era recuperar la cultura de tradición oral.



Las Leyendas de Bécquer

Como ya leíste, las Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer se caracterizan por combinar una acción sobrenatural con una ambientación realista. Además, podemos sistematizar otras características a partir de lo  siguiente: 

Marco espacial: Bécquer prefiere las ciudades antiguas (Soria, Toledo, Sevilla), los castillos, templos y monasterios, las ruinas abandonadas, lugares todos propicios para la imaginación o el misterio. El entorno natural, como los sentimientos de los personajes, es lúgubre, melancólico o enigmático. 

Marco temporal: En casi todas las Leyendas el hecho culminante ocurre de noche y la época predilecta es siempre el pasado, preferentemente la Edad Media.

Protagonistas: Los protagonistas de las Leyendas suelen responder a arquetipos románticos: héroes rebeldes, hombres que no son capaces de controlar sus sentimientos y se arriesgan inútilmente en un amor que tendrá final trágico. Son enamorados, impulsivos e imprudentes. Las mujeres son hermosas, pero perversas. Encarnan valores ideales como el amor absoluto, o maléficos, como  la pasión desmedida o la crueldad. 

Desenlace: Los desenlaces son siempre trágicos, consecuencia de una conducta imprudente o de haber transgredido una prohibición.

El elemento clave: el prodigio: En las Leyendas hay un momento culminante en el que ocurre un prodigio, un hecho maravilloso que rompe la normalidad. En ocasiones este prodigio tiene un carácter sagrado, como en el Miserere o en Maese Pérez el organista; otras, se basa en creencias populares o supersticiones: lagos encantados (en Los ojos verdes), muertos vivientes (en el Monte de ánima, o el Miserere), etc. En todos los casos el elemento clave es el misterio: la confusa frontera entre la realidad y la imaginación.

Narrador: El narrador recurre al recurso de mostrarse como un cronista que ha recopilado el relato que nos dará a conocer como si fuese un folclorista. Pero este narrador escamotea sus fuentes, a medias reales, a medias fingidas. La apelación a la fuente es el guiño de Bécquer al escéptico lector del siglo XIX, menos propenso que el oyente original de esas tradiciones a creer a pie juntillas en la presencia de lo sobrenatural en el mundo

Tópicos: En las Leyendas de Bécquer se tratan varios temas propios del Romanticismo: el amor trágico o imposible, truncado por la sociedad o las circunstancias; la búsqueda de un ideal inalcanzable; la maldad diabólica y la rebeldía. Pero también hay temas que reflejan el carácter y la sensibilidad del autor y su percepción de la realidad: la música como una manifestación artística sublime, la intuición, la fe religiosa. 

Lenguaje: Los relatos se caracterizan por un lenguaje elaborado, muy cercano por momentos a la poesía. La selección del léxico es muy cuidada y el empleo de recursos estilísticos muy profuso.



Otras Leyendas que también podés leer:

La ajorca de oro

El rayo de luna

Los mecanismos de lo fantástico en Cortázar

Carta a una señorita en París


Los cuentos fantásticos de Julio Cortázar cuestionan las categorías con las que comprendemos la realidad, tales como el tiempo, el espacio y la causalidad lógica. Por esta razón, puede afirmarse que presentan una visión extrañada del mundo. En los estudios literarios, se llama “extrañamiento” al fenómeno de volver extraños los objetos y la cotidianeidad, cuya percepción tenemos automatizada. Lo fantástico, entonces, se convierte, mas que en la aparición de una nueva realidad, en el replanteo de los hechos y acciones cotidianas desde una nueva perspectiva que permite no huir de lo real, sino percibirlo (y comprenderlo) de otra manera.
Para conseguir este efecto, Cortázar recurre muchas veces a alterar algunas de las conocidas dualidades con las que nos manejamos, por ejemplo, cuestionando los límites entre:

pasado/presente

acá/allá

yo/otro

sueño/vigilia

realidad/ficción

Se ha dicho que Cortázar elaboró una “literatura de pasajes”: los personajes de sus relatos van de un mundo a otro o de un tiempo a otro distinto y sus textos tematizan las consecuencias de ese pasaje entre espacios que la percepción habitual mantiene separados.

Otro recurso empleado por el autor es la elipsis, que consiste en omitir ciertos datos, lo cual conduce a infinidad de interpretaciones del relato. “Casa tomada” es el mejor modelo, ya que narrador nunca nombra aquello que “toma” la casa, y esto permite diferentes lecturas.

Ejemplos de dualidades cuestionadas en los relatos.

Lo familiar y lo extraño: En "No se culpe a nadie", una situación tan cotidiana como la colocación de un pulóver desencadena consecuencias peligrosas.

Pasado y presente: En "La noche boca arriba",  a través del dormir y la vigilia, se vinculan el México Azteca y una ciudad contemporánea al lector.

Realidad y ficción: En "Continuidad de los parques", los límites entre lo que el lector vive y la materia narrativa que está leyendo se vuelven difusos. 

El yo y el otro: La clásica temática del doble se hace presente en "Lejana", cuento en el que Alina Reyes y su doble, una mendiga en un puente helado de Budapest, se vinculan a través de las vívidas sensaciones que Alina vuelca en Buenos Aires en su diario.  

Lo racional e irracional: en "Carta a una señorita en París", la irrupción de lo ilógico se hace presente en un hombre que vomita conejos vivos que desordenan su mundo y lo conducen al suicido. 

Verdad y mentira: En "La salud de los enfermos", para proteger a una madre del impacto que podría causar en su frágil salud una mala noticia, toda la familia sostiene una mentira, a punto tal de terminar tomándola como verdad.

Otros cuentos fantásticos de Julio Cortázar

Axolotl

Casa tomada

La caricia más profunda


¿Qué es lo fantástico?



El término "Fantástico" llega al español a través del latín, que a su vez, lo toma del griego "fantastikos" que significa "relativo al sueño, la apariencia, la ilusión; aquello que se relaciona con la imagen de algo en el espíritu"

El término fantástico ha sido utilizado para englobar producciones literarias bien diversas, como las leyendas folclóricas, los relatos de terror, de fantasmas y de ciencia ficción, entre otros. Pero, ¿cómo definir con precisión lo fantástico?
Uno de los críticos que más ha reflexionado sobre este tema ha sido Tsvetán Todorov en su libro Introducción a la literatura fantástica, en el que clasifica los sucesos narrados en cualquier relato en dos grandes grupos: por un lado, los textos pueden dar cuenta de sucesos normales, es decir, regidos por las leyes físicas que gobiernan nuestro mundo cotidiano; y, por el otro, en cambio, pueden presentar sucesos anormales, que no se ajustan a dichas leyes. Por ejemplo, si un personaje tira una piedra y esta cae al suelo configuraría un suceso normal; pero si la piedra se pierde volando en la inmensidad del cielo, el hecho sería, claramente, anormal. 
Si un relato presenta, exclusivamente, acontecimientos normales nos hallamos en presencia de una narración realista; pero si combina ambos tipos de hechos, sostiene Todorov, deberíamos prestar atención a la forma en que éstos son presentados. Así, se definen tres clases de relatos:

Maravillosos
Cuando el hecho anormal no se puede explicar según las leyes del mundo real conocido por nosotros, sino que obedece a otras reglas que son las de un sistema diferente del nuestro, nos encontramos dentro del mundo de lo maravilloso, al que pertenecen los cuentos de hadas, muchos relatos folclóricos en los que intervienen criaturas como duendes, gnomos, magos, brujas y hechiceros. Este universo no cuestiona nuestra realidad, pertenece a otra esfera y tanto los lectores como los personajes aceptan que, allí, las cosas funcionan de forma muy diferente.



Extraños
Cuando el fenómeno anormal recibe, al final del relato, una explicación lógica y racional que lo normaliza, es decir que transforma eso anormal en un suceso científicamente comprobable y que solo nos ha parecido raro en virtud de un truco, ilusión o mentira, nos encontramos en el territorio de lo extraño.


Fantásticos
Cuando el hecho anormal no resulta explicable ni se lo puede ubicar en otro mundo regido por otras leyes, estamos en presencia de lo fantástico. El lector y los propios personajes dudan y así se constituye la vacilación propia del relato fantástico. El acontecimiento se presenta en este mundo -en ningún otro-, pero no puede ser explicado racionalmente; es lo suficientemente ambiguo como para no permitir ni una cosa ni otra y cuestionar así los conceptos de real e imaginario, de lo lógico e irracional que podamos poseer. De esta manera, lo fantástico vendría a ser esa franja de falta de certeza -la incertidumbre- que nos cuestiona como seres racionales y problematiza la realidad que nos rodea.

Para profundizar lee también "lo fantástico"

25/11/14

El culteranismo

¡Qué presurosa corre, qué secreta, a su fin nuestra edad!
L. de Góngora

El culteranismo fue una escuela literaria barroca derivada del conceptismo. Los escritores culteranos pusieron mayor énfasis en la forma y en la estética que en el contenido, por lo que algunos críticos afirman que se adelantaron al concepto del arte por el arte.
Se caracteriza por innovaciones y aportaciones lingüísticas, el gusto latinizante, neologismos y cultismos. Abundan las metáforas, los símbolos, los hipérbaton, los adjetivos, las modificaciones en la sintaxis, las onomatopeyas y las aliteraciones, entre otros artificios, para alcanzar una cumbre estética y crear musicalidad en los versos. Además de la sonoridad, aparecen referencias a colores, rehuyendo el léxico común ("escarlata" para rojo, "cerúleo" para azul, y "lino" para blanco). Son frecuentes los temas mitológicos y la evasión del mundo contemporáneo.